LA EDUCACIÓN PROTEGE

Los niños y las niñas tienen el derecho a estar protegidos, a vivir en un entorno saludable y de buen trato, libre de cualquier forma de violencia, abuso, explotación, discriminación y trato cruel.

SITUACIÓN

Los problemas del mundo les roban sus derechos. La violencia, el matrimonio o el trabajo infantil, el embarazo adolescente o la trata, entre otros problemas endémicos, les roban la infancia y la oportunidad de un futuro mejor.

La violencia adopta múltiples formas y se da en todos los entornos de los niños y las niñas, en su hogar, en su comunidad, en la escuela, pero también en las redes sociales.

Y en situaciones de emergencias los niños y las niñas son los más expuestos a las peores formas de violencia.

Cada año,

mil millones de niñas y niños sufren violencia física, sexual o psicológica.

En el mundo,

160 millones de niños y niñas trabajan y de ellos, 79 millones lo hacen en empleos que ponen en riesgo su vida.

Cada año,

12 millones de niñas están obligadas a casarse. Son 28 niñas cada minuto.

Se estima en

2,5 millones el número de personas víctimas de la trata de personas. Y de cada víctima identificada existen 20 más sin identificar y la mitad son menores de edad.

Estos datos solo representan la punta del iceberg y la única manera de revertir esta situación es prevenir, acompañar y actuar. Y la educación siempre es parte de la solución.

CÓMO ACTUAMOS

La educación protege y previene. Y para un mundo libre de violencia contra la infancia:

Trabajamos para acabar con todas las formas de violencia junto con niños, niñas y jóvenes, sus familias, comunidades y el entorno.

Acompañamos a las instituciones con las que trabajamos para poner en marcha sistemas de prevención, detección y respuesta ante cualquier forma de violencia contra la infancia.

Reforzamos los conocimientos de niñas, niños, adolescentes, sus familias, docentes y comunidades sobre los derechos de la infancia, y sobre las prácticas perjudiciales para su desarrollo y bienestar.

Incidimos en los gobiernos y autoridades para que mejoren las leyes que velan por la protección de la infancia y actúen por su efectiva implementación.

Dotamos a las escuelas de materiales pedagógicos e instalaciones seguras en las zonas de mayor vulnerabilidad y en contextos de crisis.

Fomentamos la participación y las escucha activa hacia los niños y las niñas para conocer, detectar y prevenir la violencia e implicarles en las soluciones.

Garantizamos espacios protectores y seguros en situaciones de emergencia derivadas de crisis o desastres, cuando la infancia queda aún más expuesta a la violencia.

HAZTE SOCIO

Trabajamos desde hace más de 30 años para que los niños y las niñas más vulnerables puedan acceder a una educación de calidad y segura, incluso en situaciones de emergencia.

Actuamos para que las escuelas sean siempre un lugar seguro y protegido, que la educación sea de la mejor calidad posible y adaptada a cada contexto, que el profesorado esté formado y que los equipamientos sean los adecuados.

Estamos convencidos de que la educación cura, protege y empodera. Porque la educación es la raíz para cambiar realidades que explotan y agreden a la infancia. Porque para muchos niños y niñas la educación es su única tabla de salvación.

Ayúdanos a mejorar la vida de miles de niños y niñas a través de la educación.

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PREGUNTAS FRECUENTES

Educo basa su trabajo en marcos internacionales como la Convención sobre los Derechos del Niño y otros estándares y normas internacionales como la Norma Humanitaria Escencial, Esfera, las Normas Mínimas de la INEE, las Normas Mínimas para la Protección de la Infancia en la Acción Humanitaria, el Manual de Género para Acción Humanitaria del IASC y el Marcador de Género y Edad. Además, aplica políticas internas de salvaguarda que garantizan entornos seguros para todos los niños y niñas.
Es especialmente importante para Educo el cumplimiento de los principios humanitarios de humanidad, imparcialidad, neutralidad e independencia, así como el marco jurídico de la Acción Humanitaria, esto es el Derecho Internacional Humanitario, el derecho internacional de los derechos humanos y el derecho internacional de las personas refugiadas. Educo no comprometerá el cumplimiento de estos principios, normas, códigos y marco jurídico, ya sea cuando trabaje con socios o directamente.

Sí. Educo ofrece acompañamiento psicológico y apoyo psicosocial a niños, niñas y familias afectadas por situaciones de violencia o vulneración de derechos. Estos servicios se adaptan a cada contexto y buscan promover la recuperación emocional y la resiliencia.

Educo no cuenta con programas de voluntariado en terreno, ya que nuestros proyectos los desarrollan equipos locales y organizaciones especializadas. No obstante, las personas interesadas pueden colaborar en acciones de sensibilización, campañas educativas o apoyo puntual en España, siempre bajo la coordinación de la organización.