Según este estudio, durante el tiempo que la televisión estuvo encendida el número de palabras y frases que intercambiaron con los pequeños fue menor que cuando la tele estaba apagada. Esto sugiere que los padres, aún sin darse cuenta, están pendientes del televisor aunque no estén concentrados en el programa, dejando por tanto de prestar atención a los niños. La televisión no sólo afecta a la cantidad de lenguaje que aprenden los niños, sino también a su calidad. Durante el transcurso del estudio, el número de palabras nuevas que los padres intercambiaban con los niños era también menor. Esto claramente, afecta a la adquisición del lenguaje, una de las habilidades más importantes que un niño desarrolla.
No hay ni que decir que los niños pequeños no deberían presenciar programas destinados a adultos, ni tan siquiera cuando estén jugando a otra cosa, aunque sea en compañía de sus padres. Pero además la Academia Americana de Pediatría, organización de gran prestigio en materia de salud infantil, recomienda que los niños de menores de dos años no vean la tele en ninguna ocasión. Ni teles, ni pantallas de ningún tipo.
La televisión, usada con sentido común, es un gran invento y a veces hasta te puede sacar de algún apuro, pero no hay que tenerla encendida a todas horas porque sí. Además de desperdiciar electricidad, te distrae lo suficiente como para que no hables con tus hijos.
Aprovecha el verano para pasar más rato sin tele. Sal a jugar, haz pompas de jabón o caza insectos... Lo que os apetezca. O simplemente, lee con tus hijos, así no sólo no se frenará el desarrollo del lenguaje, sino que mejorará su aprendizaje de palabras nuevas. Así disfrutarás aún más de todas esas palabras que dicen con lengua de trapo. Definitivamente, se trata de una de las etapas más divertidas de la infancia.
Derechos de imágenes: Lars Ploughmann, MiikaS.
Academia Americana de Pediatría , Desarrollo infantil , Lenguaje , Televisión
Conoce quiénes somos, qué hacemos y por qué lo hacemos.
Recibe nuestra newsletter con todas las novedades.
Mucho más que un regalo. Lo que aquí parece cotidiano, allí se transforma en algo extraordinario. COLABORA CON LOS REGALOS SOLIDARIOS EDUCO